20231211

Divisiones, pleitos, discordias, enemistades... ¡Construyamos puentes!

COMENTARIOS CORTOS Y ÚTILES

Adolfo Miranda Sáenz


Dos hermanos, Tomás y Juan, vivían uno al frente del otro en dos casas en un bello terreno en el campo. Por varias problemitas pequeñas que se fueron acumulando, los hermanos fueron dejando de hablarse. Incluso evitaban cruzarse en el camino.
 
Cierto día llegó a la casa de Tomás un carpintero y le preguntó si tendría trabajo para él. Tomás le contestó:
 
— ¿Ve usted esa madera que está cerca de aquel pequeño río? Pues la he cortado ayer. Mi hermano Juan vive en frente y, a causa de nuestra enemistad, desvió ese riachuelo para separarnos definitivamente. Así que yo no quiero ver más su casa. Le dejo el encargo de hacerme una cerca muy alta que me tape la vista de su casa.
 
Tomás se fue al pueblo y regresó hasta entrada la noche. Se llevó una sorpresa al llegar a su casa, cuando, en vez de una cerca, encontró que el carpintero había construido un puente sobre el pequeño río que unía las dos partes del terreno. Sin reponerse del asombro, de pronto vio en frente suyo a su hermano, que en ese momento estaba atravesando el nuevo puente con una sonrisa:
 
— Tomás, hermano mío, no puedo creer que hayas construido este puente, habiendo sido yo el que te ofendió desviando el riachuelo para separarnos. Vengo a pedirte perdón.
 
Entonces, los dos hermanos se abrazaron.
 
Cuando Tomás se dio cuenta de que el carpintero se alejaba, le dijo: —Amigo, ¿cuánto le debo? ¿Por qué no se queda y cena con nosotros?
 
El carpintero le contestó: —No me debe nada, gracias. Tampoco me puedo quedar más tiempo. ¡Tengo muchos puentes que construir!
 
Muchas veces frente a un conflicto solemos tomar posición a favor  de una u otra parte. Nos sentimos incluso presionados para elegir de qué parte estamos. ¿Por qué en vez de eso no intentar construir puentes? Con buena voluntad podemos ayudar a construir puentes que ayuden a resolver un conflicto. Reflexionemos sobre qué puentes podemos construir, cosas que aceptar y perdonar para vivir en armonía. Sin odios, sin rencores, ni alimentando conflictos que lo único que producen es más y más distancia y enemistad. Usted, ¿está dispuesto a construir puentes? 

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